Análisis de Textos

Licenciada en Comunicación Social
Estudiante de:
-Lic. en Psicología
-Lic. en Inglés
-Comercio Electrónico
-Periodismo Digital
-Administración Digital
-Tecnología WEB

lunes, 30 de septiembre de 2013

¡Falso Católico!


¿En verdad eres Católico?

Aquí les traigo un vídeo muy bueno, para saber si eres o no un católico real.



Y sino se les ve el vídeo aquí les dejo un link para que lo abran: http://www.youtube.com/watch?v=aEKsx3XW76o

Analiza que estas haciendo en tu vida, desde las publicaciones que haces facebook, twitter u otra red social, que deberías utilizar como medio evangelizador; hasta la obras de caridad que haces con el hermano. No hay salvación sino obras de buena manera, da testimonio de vida en todo momento.

¡DIOS TE BENDIGA!

domingo, 29 de septiembre de 2013

San Miguel Arcangel

29 de Septiembre: San Miguel Arcángel: 

Oración a San Miguel Arcángel:

San Miguel Arcángel,

defiéndenos en la batalla,

se nuestro amparo contra la perversidad y

asechanzas del demonio.

Reprímale Dios, pedimos suplicantes,

y tu príncipe de la milicia celestial,

arroja al infierno con el divino Poder a satanás

y a los otros espíritus malignos

que andan dispersos por el mundo,

para la perdición de las almas.

Amén.

Articulo sobre Ángeles de Dioshttp://www.es.catholic.net/santoral/articulo.php?id=581

San Miguel en las Sagradas Escrituras
En el Antiguo Testamento
San Miguel aparece como el guardián de la nación hebrea.

En el libro de Daniel, Dios envía a San Miguel para asegurarle a Daniel su protección.
"Y ahora volveré a luchar con el príncipe de Persia...Nadie me presta ayuda para esto, excepto Miguel, vuestro príncipe, mi apoyo para darme ayuda y sostenerme." -Daniel 10:13.
"En aquel tiempo surgirá Miguel, el gran príncipe que defiende a los hijos de tu pueblo" -Daniel 12:1

Fiesta de Arcangeles (Miguel, Gabriel y Rafael): http://www.corazones.org/santos/miguel_arcangel.htm

sábado, 28 de septiembre de 2013

¿Por qué Dios me escogió a mi?

¿Jesús que viste en mí? 

Quiero comenzar con este vídeo que sera de reflexión, y nos ayudará a responder la gran interrogante ¿Por qué a mi, sino soy perfecto(a) para ti?






Lucas 5, 27-32 "En aquel tiempo, vio Jesús a un publicano, llamado Leví (Mateo), sentado en su despacho de recaudador de impuestos y le dijo; "Sígueme". Él, dejándolo todo, se levantó y lo siguió.

Leví ofreció en su casa un gran banquete en honor de Jesús, y estaban a la mesa, con ellos, un gran número de publicanos y otras personas. Los fariseos y los escribas criticaban por eso a los discípulos, diciéndoles: ¿Por qué comen y beben con publicanos y pecadores? Jesús les respondió: No son los sanos los que necesitan al médico sino los enfermos. No he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores, para que se conviertan".



Asì como se nos muestra en el evangelio de Lucas, Jesús también te llama y pide que le sigas, es allí donde una gran interrogante se interpone y comienzas a verte extraño, preguntándote porque Dios te quiere a ti y no a otro, es sencillo, Él te elige todos los días, te quiere como su discípulo, en deficiòn es aquel que le sigue y sobretodo va llevando la palabra a todos los lugares. 
Es hora que ya no te sigas dando dolores de cabeza de  que quizás no mereces estar al servicio de Dios, comienza mejor por preguntarte de qué manera puedes agradar a Cristo y empezar a cambiar tus actitudes malas, porque hoy Jesús quiere entrar a tu vida, sanarla y hacerte su amigo. 

Juan 15, 14-16 "Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando.Ya no los llamo servidores, porque el servidor ignora lo que hace su señor; yo los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que oí de mi Padre. No son ustedes los que me eligieron a mí, sino yo el que los elegí a ustedes, y los destiné para que vayan y den fruto, y ese fruto sea duradero".


viernes, 27 de septiembre de 2013

Reflejen el Espíritu Santo

Luz para el camino:
Mt 5, 14: -"Ustedes son la luz del mundo"


Había una vez, hace cientos de años, en una ciudad de Oriente, un hombre que una noche caminaba por las oscuras calles llevando una lámpara de aceite encendida.
La ciudad era muy oscura en las noches sin luna como aquella.





En determinado momento, se encuentra con un amigo. El amigo lo mira y de pronto lo reconoce.

Se da cuenta de que es Guno, el ciego del pueblo. Entonces, le dice:
- ¿Qué haces Guno, tú ciego, con una lámpara en la mano? Si tú no ves...

Entonces, el ciego le responde:
- Yo no llevo la lámpara para ver mi camino. Yo conozco la oscuridad de las calles de memoria. Llevo la luz para que otros encuentren su camino cuando me vean a mi...

- No solo es importante la luz que me sirve a mí, sino también la que yo uso para que otros puedan también servirse de ella.

Cada uno de nosotros puede alumbrar el camino para uno y para que sea visto por otros, aunque uno aparentemente no lo necesite.

Alumbrar el camino de los otros no es tarea fácil...Muchas veces en vez de alumbrar oscurecemos mucho más el camino de los demás...¿Cómo? A través del desaliento, la crítica, el egoísmo, el desamor, el odio, el resentimiento...



¡Qué hermoso sería sí todos ilumináramos los caminos de los demás!

Mt 5,16 "Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que están los cielos".








jueves, 26 de septiembre de 2013

¿Eres un misionero comprometido?

¡Cruzar fronteras por Jesús!

Es preciso comenzar con esta pregunta para que analicen si de verdad serian capaz de ir mas allá de lo habitual para dar a conocer a Jesús en otros lugares que quizás no lo conocen, o en otros que sí lo conocen pero les hace falta ese empujón para servirle; Sin embargo como misioneros suele llegar lo rutinario y comienzan a desmotivarse en el servicio a Cristo, es por ello que se darán una serie de excusas que suelen ser muy comunes al momento de ir a evangelizar. 

  • ¡No tengo tiempo, tengo muchas cosas que hacer!: Cuando se trata de ir a evangelizar se comienzan a crear una serie de cosas en la mente para intentar convencer a los demás de lo ocupados que puedan estar, ahora bien, ¿A Dios también lo convenciste? ¡Te aseguro que no!.  "No puedo parar de trabajar; ya tendré toda la eternidad para descansar" (Madre Teresa de Calcuta).


  • ¡Me siento enfermo!: Es la excusa mas habitual que se ve en estos tiempos, sin embargo, aquel que cree en Jesús no se debe sentir enfermo y menos si se trata de ir a llevar su palabra, porque, ¿Crees que Dios daría un mal para ti?  "Quien quiera salvar su vida, la perderá; pero quien pierda su vida por mí y por el Evangelio, la salvará" (Mc 8,35).



  • ¡Ya son muchos, si falto yo no importa!: No se trata de la cantidad que vayan a dar la buena nueva, se trata de que tù lo hagas, porque el mandato de ir a evangelizar no es solo para algunos, es para todos los bautizados y entre ellos, tù. Cuando llegues al cielo Dios no preguntar si en esa evangelización fueron muchos personas; te va a preguntar sí ibas allí. “Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, y tendrás éxito donde quiera que vayas." (Josùe 1, 6-7).



  • ¡No me gusta esa persona en el grupo!Jesús nos ha dado un mandamiento, que nos amemos unos a los otros como el ha amado. Esa es la parte más difícil del creyente, amar su entorno social, amar a aquel que tiene otra forma de pensar y sobretodo amar a quien le ha hecho daño; pero qué caso tendría que todo fuese fácil. Este camino tiene un sendero angosto donde el objetivo es ser semejantes a Jesús  por eso se debe comenzar a aceptar que no todos tienen las mismas formas de pensar, de sentir y de actuar; Que el ser humano tiene rasgos que le hacen ser único en este mundo, y por los cuales Dios lo ha colocado a tu lado para que aprendas a convivir con esa persona. Para Dios no existen las casualidades, y si hay personas a tu lado es momento que experimentes el amor de aquel que murió por ti. “Llénense de alegría teniendo unos mismos sentimientos, compartiendo un mismo amor, viviendo en armonía y sintiendo lo mismo. No hagan nada por rivalidad o por vanagloria; sean por el contrario, humildes, y consideren a los demás superiores a ustedes mismos. Que no busque cada uno su propio interés, sino el de los demás. Tengan, pues, los sentimientos que corresponden a quienes están unidos a Cristo Jesús.”(Filipenses 2, 2-5).


  • ¡No tengo dinero!-¡No habrá comida!: Para ir a evangelizar no necesitas llevar dinero, a menos que desees darlo a los que en verdad lo necesitan, puesto que aquella persona que este motivada a dar la palabra no debe preocuparse por las cosas materiales, sino por lo espiritual, ademas, cuando se hacen obras buenas se nos multiplica en gratitud, les aseguro que nada les faltará. "No andéis, pues, preocupados diciendo: ¿Qué vamos a comer?, ¿qué vamos a beber?, ¿con qué vamos a vestirnos?. Que por todas esas cosas se afanan los gentiles; pues ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso. Buscad primero su Reino y su justicia, y todas esas cosas se os darán por añadidura" (Mt 6, 31-33).




  • ¡Otra vez a orar y evangelizar!: Dice la palabra que a quien se le confía en lo poco y da buenas obras, se le confiará en lo mucho; por esto, que no te resulte tedioso orar y evangelizar porque Dios te ha confiado una misión y si lo haces con amor, te aseguro que algo grande te confiará. No obstante, un misionero debe orar siempre, no solo cuando esta en la Iglesia y debe hacerlo sin desanimarse, porque còmo puede ir a hablar sobre alguien con el cual no se habla; y para hablar con Dios el mejor medio es la oración. "Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá." (Lucas 11:9), como también es necesaria la oración en grupo (horas santas, rosario, por los enfermos, misioneros, perdidos, por el grupo. entre otros), ir como grupo a la Eucaristia, mantenerse confesados y comulgar para que asi el grupo este fortalecido por los sacramentos. "Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones." Hechos 2:42. Asimismo nunca te debes cansar de evangelizar porque si amas a Dios tendrás un deseo de que sea conocido y amado. "¡Ay de mí si no anuncio el Evangelio!" (1Cor 9,16), por otro lado es un mandato que nos ha dejado Jesùs: "Vayan por todo el mundo y prediquen mi Evangelio a toda criatura" (Mc 16,15). Tu eres el escogido por Dios, y cuando le respondes el llamado debes perseverar aunque el camino sea difícil. “Antes de formarte en el seno de tu madre, ya te conocía; antes de que tú nacieras, yo te consagré, y te destiné a ser profeta de las naciones”. (Jer 1,5)




  • ¡No hay transporte!: El servicio hacia las demás personas es una característica de quien es discípulo de Jesús, por lo tanto afuera hay un mundo que necesita de misioneros comprometidos en el servicio, que no se detenga por nada, que si les toca ir a pie, van a llevar la palabra. Jesús no andaba en carro o en moto para ir sanando a los enfermos espirituales y corporales, el no llevaba comida, ni ropa, todo lo hizo por amor;Con solo ir a pie, cargando la cruz, donde llevaba en hombros los pecados de la humanidad, imagínate el peso, aun así no pidió que lo llevaran, ¡y él podía pedirlo!, puesto que es el hijo de Dios, pero no lo hizo por amor a ti y a mi. ¿entonces te va a detener algo tan insignificante como un transporte?. “Irás adondequiera que te envíe, y proclamarás todo lo que yo te mande. No les tengas miedo, porque estaré contigo para protegerte”. (Jer 1,7)







Este niño nos demuestra que cuando uno quiere las excusas están demás. 

Me quedaría corta de las innumerables excusas que hay para ir a predicar el evangelio, y lo peor del caso es que lo hacemos con nosotros mismos porque Dios conoce el corazón de cada persona; dice la Madre Teresa de Calcuta "Para hacer que una lámpara esté siempre encendida, no debemos de dejar de ponerle aceite". si bien es cierto cada excusa que sacamos es porque has dejado de buscarlo en la oración, es allí donde comienzas a debilitarte y tu fe se desvanece, crees que por haber ido una vez ya estas salvo, y resulta que esa luz se esta apagando, necesitas volver a encenderla y entender que sin Dios nada eres. 
Quizás tengamos miedo a lo que viene mas adelante o nos asuste el abandonar tantas cosas, peor te aseguro que seras premiado, porque aunque no sepamos que es lo que nos espera, si viene de Dios es algo magnifico. 
Cuando comenzamos a hacer con amor lo que se nos ha encomendado, se empieza a sentir una alegría inexplicable, el ver sonreír a una familia que le llevas el evangelio,  la sonrisa de un niño cuando le hablas de Dios, un abrazo confortable de aquella persona que te dice "gracias por estar aquí , o de aquella que te dice "ora por mi", al terminar tu evangelización y te digan "los extrañaremos" significa que debes seguir y no desmayar porque hay personas que confían en ti y en tu testimonio de vida. Cuando te vas adaptando a mostrar el amor de Dios, estas tomando rumbo de tu misión aquí y ahora. 

Para cruzar fronteras no hacen falta las excusas, si amas a Dios iras a donde necesiten de la palabra. 



Testimonio:
Una mujer digna de admirar, que merece que todos la conozcan. su nombre Iris Vargas, nunca coloco una excusa para realizar una actividad en la Iglesia, y nos damos cuenta como hacen falta las persona entregadas al servicio de Dios con verdadero amor.
Ella rezaba todos los días el santo rosario, asistía a misa, leía la palabra, frecuentaba los sacramentos; quedaría corta de tantas cosas que realizaba,pero comentaré sobre algunas que nos ayudará a reflexionar todas las excusas que muchas veces le ponemos a Dios. 
Su casa quedaba aislada de la Iglesia de la parroquia, ella iba a rezar el Santo Rosario, luego se quedaba para escuchar misa, asistía también a asambleas familiares, misas solemnes, siempre asistía con devoción a las actividades religiosas, ella iba desde su casa hasta la Iglesia caminando. Las misas de aguinaldo son a las 5 de la mañana, ella se iba a las 4 am para llegar a tiempo al rosario, y comentaba que se iba a pie desde su casa a la iglesia rezando el rosario, lo màs importante de todo esto, es que ella no coloco ninguna excusa frente a todas las pruebas que le coloco Dios en el camino, nunca de su boca se escucho decir "no tengo transporte para ir, no tengo dinero, tengo muchas cosas que hacer, ya son muchos, si falto yo no importa, otra vez ir para allá". 
La palabra de Dios dice que una fe sin obra es una fe muerta,  Iris es un ejemplo de que nada es imposible, que se le puede dar un SI a Dios en todo momento, sin excusas y sin miedos. 
Aún cuando ya esta apunto de partir  a la casa de Dios ella seguía dando testimonio del amor de Dios. 
Cuando ella estaba enferma todos oraban y la ayudaban en sus necesidades, las obras que uno hace por el prójimo se devuelven en abundancia.
Ella muere un 02 de septiembre de este año, y estoy segura que todas las obras buenas que hizo ya fueron recompensadas  y que las puertas del cielo fueron abiertas de par en par para ella.
Q.E.P.D IRIS VARGAS. 
























Para finalizar es momento que comiences a adquirir un compromiso de tu vida espiritual, 
y entiendas que Dios te ha dado una misión, él confía en ti. no lo defraudes. 

Espero que este vídeo les sirva de reflexión. 
Dios te bendiga.


lunes, 23 de septiembre de 2013

OCTUBRE MISIONERO

      JORNADA MUNDIAL DE LAS MISIONES
            Es importante comenzar desarrollando la importancia que tenemos todos los bautizados dentro de la Iglesia Católica, como también afirmando que tenemos la obligación de anunciar la buena noticia, entonces es momento de preguntarnos ¿estamos realmente comprometidos con Jesús?. Si tu respuesta es No, pues comienza a buscar el centro de tu vida y te darás cuenta que sin Dios en tu corazón nada eres. por otro lado si tu respuesta resulta afirmativa, es hora de ponerse las pilas y de comenzar a demostrar que si lo estas, y que mejor manera que cumpliendo lo que Jesucristo dejo antes de irse "Id por todo el mundo y anunciar el evangelio a toda criatura" (Marcos 16, 15).
              
            Ahora bien, en octubre millones de jóvenes entregan su vida para anunciar el evangelio, para que así, a pesar de las distancia de distintos paises nada los detenga, en diferentes idiomas, colores, culturas hay algo mas fuerte y se llama "fe y oracion" todos juntos en el mismo idioma del amor se unen para preparse a la Jornada Mundial de las misiones. 

Estas son las palabras del Papa: «Este es mi deseo para la Jornada Mundial de las Misiones de este año. Bendigo de corazón a los misioneros y misioneras y a todos los que acompañan y apoyan este compromiso fundamental de la Iglesia
para que el anuncio del Evangelio pueda resonar en todos los rincones de la Tierra, y nosotros, ministros
del Evangelio y misioneros, experimentaremos “la dulce y confortadora alegría de evangelizar”
(Pablo VI, Exhort. apost.Evangelii nuntiandi, 80)» (n. 5).


Indicaciones para celebrar el Octubre 

Misionero OMP


1.ª Semana: ORACIÓN 
En esta semana se pretende promover entre los fieles la constancia en la oración para dar gracias a Dios por el don de la fe, así como para pedir al dueño de la mies que envíe operarios a su mies y que el anuncio de la Buena Noticia llegue a todos los pueblos. Conviene llevar estas intenciones tanto a la oración personal como a la comunitaria, comenzando por la participación en la Eucaristía, y sin olvidar el rezo del Rosario Misionero, las vigilias de oración y otras posibles celebraciones litúrgicas de carácter misionero.
Benedicto XVI nos recuerda que “la oración se convierte en estos momentos en una exigencia muy concreta, como medio para recibir constantemente fuerzas de Cristo”. 

2.ª Semana: SACRIFICIO 
Valorar la dimensión redentora y salvífica del sacrificio y del sufrimiento es el principal objetivo de esta semana. Así, se nos mueve a unir a la cruz de Cristo y ofrecer por la evangelización del mundo nuestras obras de penitencia y la aceptación de nuestros dolores. En este camino también se nos invita a contemplar la vida de Jesús, a conocer y valorar la vida de sacrificio y entrega de los misioneros, y a amar y cuidar a los enfermos (por ejemplo, acompañándoles y leyendo con ellos el tríptico Enfermos misioneros). 
“Es allí, en la cruz, donde puede contemplarse esta verdad. Y a partir de allí se debe definir ahora qué es el amor”, explica el Papa Benedicto XVI. 

3.ª Semana: LIMOSNA 
Esta semana se orienta a implicarnos en la cooperación económica con las misiones. Para ello es preciso informarnos sobre las necesidades en medio de las cuales viven y desarrollan su labor los misioneros, y sentir como nuestras esas urgencias, entregando en beneficio de las misiones una desprendida aportación económica. Se nos anima a com-partir los bienes con quienes carecen de ellos, a la vez que se nos estimula a com-partir la vida como voluntarios en tareas y acciones que ayuden a los más necesitados. 
En palabras de Benedicto XVI, “quien es capaz de ayudar reconoce que precisamente de este modo también es ayudado”.  

4.ª Semana: VOCACIÓN MISIONERA 
El objetivo de esta semana es suscitar entre todos nosotros la apertura para escuchar la voz de Dios, que llama y envía a la misión. Para ello se recomienda participar en actividades de formación misionera, celebrar algún encuentro con misioneros, estar atentos y disponibles a la llamada de Dios, y mantener vivo el interés por las necesidades de la Iglesia a la hora de llevar al mundo el mensaje de Salvación. La animación misionera nos ayuda a comprometernos a ser instrumentos de unidad y de amor y a estar receptivos a la posible vocación misionera. 
“Los misioneros”, dice Benedicto XVI, “han de ser personas cuyo corazón ha sido conquistado por Cristo con su amor, despertando en ellos el amor al prójimo”.


Es necesario que comiences a preparar todo lo que necesitas para trabajar en tu comunidad, unete a este mes misionero, sumate a los seguidores de Cristo.
Aqui te dejo el material del Domund 2013:
 http://www.omp.es/OMP/domund/jornada/materiales/octubremisionero.pdf

LEMA DOMUND 2013"Fe + Caridad = Misión"

Domund

MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO: 

Queridos hermanos y hermanas:
Este año celebramos la Jornada Mundial de las Misiones mientras se clausura el Año de la Fe, ocasión importante para fortalecer nuestra amistad con el Señor y nuestro camino como Iglesia que anuncia el Evangelio con valentía. En esta prospectiva, querría plantear algunas reflexiones.

1. La fe es un don precioso de Dios, el cual abre nuestra mente para que lo podamos conocer y amar; Él quiere relacionarse con nosotros para hacernos partícipes de su misma vida y hacer que la nuestra esté más llena de significado, que sea más buena, más bella. ¡Dios nos ama! Pero la fe necesita ser acogida, es decir, necesita nuestra respuesta personal, el coraje de poner nuestra confianza en Dios, de vivir su amor, agradecidos por su infinita misericordia. Es un don que no se reserva sólo a unos pocos, sino que se ofrece a todos generosamente. ¡Todo el mundo debería poder experimentar la alegría de ser amados por Dios, el gozo de la salvación! Y es un don que no se puede conservar para uno mismo, sino que debe ser compartido. Si queremos guardarlo sólo para nosotros mismos, nos convertiremos en cristianos aislados, estériles y enfermos. El anuncio del Evangelio es parte del ser discípulos de Cristo y es un compromiso constante que anima toda la vida de la Iglesia. 

“El impulso misionero es una señal clara de la madurez de una comunidad eclesial” (Benedicto XVI, Exhort. apost. Verbum Domini, 95). Toda comunidad es “adulta”, cuando profesa la fe, la celebra con alegría en la liturgia, vive la caridad y proclama la Palabra de Dios sin descanso, saliendo del propio ambiente para llevarla también a los “suburbios”, especialmente a aquellos que aún no han tenido la oportunidad de conocer a Cristo. La fuerza de nuestra fe, a nivel personal y comunitario, también se mide por la capacidad de comunicarla a los demás, de difundirla, de vivirla en la caridad, de dar testimonio a las personas que encontramos y que comparten con nosotros el camino de la vida. 

2. El Año de la Fe, a cincuenta años de distancia del inicio del Concilio Vaticano II, es un estímulo para que toda la Iglesia reciba una conciencia renovada de su presencia en el mundo contemporáneo, de su misión entre los pueblos y las naciones. 

La misionariedad no es solo una cuestión de territorios geográficos, sino de pueblos, de culturas e individuos independientes, precisamente porque los “límites” de la fe no solo atraviesan lugares y tradiciones humanas, sino el corazón de cada hombre y cada mujer. El Concilio Vaticano II destacó de manera especial cómo la tarea misionera, la tarea de ampliar los límites de la fe, es un compromiso de todo bautizado y de todas las comunidades cristianas: “Viviendo el Pueblo de Dios en comunidades, sobre todo diocesanas y parroquiales, en las que de algún modo se hace visible, a ellas pertenece también dar testimonio de Cristo delante de las gentes” (Decr. Ad gentes, 37). Por tanto, se pide y se invita a toda comunidad a hacer propio el mandato confiado por Jesús a los Apóstoles de ser sus “testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaría y hasta el confín de la tierra” (Hch 1,8), no como un aspecto secundario de la vida cristiana, sino como un aspecto esencial: todos somos enviados por los senderos del mundo para caminar con nuestros hermanos, profesando y dando testimonio de nuestra fe en Cristo y convirtiéndonos en anunciadores de su Evangelio. Invito a los obispos, a los sacerdotes, a los consejos presbiterales y pastorales, a cada persona y grupo responsable en la Iglesia a dar relieve a la dimensión misionera en los programas pastorales y formativos, sintiendo que el propio compromiso apostólico no está completo si no contiene el propósito de “dar testimonio de Cristo ante las naciones”, ante todos los pueblos. La misionariedad no es solo una dimensión programática en la vida cristiana, sino también una dimensión paradigmática que afecta a todos los aspectos de la vida cristiana. 

3. A menudo, la obra de evangelización encuentra obstáculos no solo fuera, sino dentro de la comunidad eclesial. A veces el fervor, la alegría, el coraje, la esperanza en anunciar a todos el mensaje de Cristo y ayudar a la gente de nuestro tiempo a encontrarlo son débiles; en ocasiones todavía se piensa que llevar la verdad del Evangelio es violentar la libertad. Pablo VI usa palabras iluminadoras al respecto: “Sería [...] un error imponer cualquier cosa a la conciencia de nuestros hermanos. Pero proponer a esa conciencia la verdad evangélica y la salvación ofrecida por Jesucristo, con plena claridad y con absoluto respeto hacia las opciones libres que luego pueda hacer [...], es un homenaje a esta libertad” (Exhort. apost. Evangelii nuntiandi, 80). Siempre debemos tener el valor y la alegría de proponer, con respeto, el encuentro con Cristo, de hacernos heraldos de su Evangelio; Jesús ha venido entre nosotros para mostrarnos el camino de la salvación, y nos ha confiado la misión de darlo a conocer a todos, hasta los confines de la tierra. Con frecuencia vemos que son la violencia, la mentira, el error las cosas que destacan y se proponen. Es urgente hacer que resplandezca en nuestro tiempo la vida buena del Evangelio con el anuncio y el testimonio, y esto desde el interior mismo de la Iglesia. Porque, en esta perspectiva, es importante no olvidar un principio fundamental de todo evangelizador: no se puede anunciar a Cristo sin la Iglesia. Evangelizar nunca es un acto aislado, individual, privado, sino que es siempre eclesial. Pablo VI escribía que, “cuando el más humilde predicador, catequista o Pastor, en el lugar más apartado, predica el Evangelio, reúne su pequeña comunidad o administra un sacramento, aun cuando se encuentra solo, ejerce un acto de Iglesia”; este no actúa “por una misión que él se atribuye o por inspiración personal, sino en unión con la misión de la Iglesia y en su nombre” (Exhort. apost. Evangelii nuntiandi, 60).Y esto da fuerza a la misión y hace sentir a cada misionero y evangelizador que nunca está solo, que forma parte de un solo Cuerpo animado por el Espíritu Santo. 

4. En nuestra época, la movilidad general y la facilidad de comunicación a través de los nuevos medios de comunicación han mezclado entre sí los pueblos, el conocimiento, las experiencias. Por motivos de trabajo, familias enteras se trasladan de un continente a otro; los intercambios profesionales y culturales, así como el turismo y otros fenómenos análogos, empujan a un gran movimiento de personas. A veces es difícil, incluso para las comunidades parroquiales, conocer de forma segura y profunda a quienes están de paso o a quienes viven de forma permanente en el territorio. Además, en áreas cada vez más grandes de las regiones tradicionalmente cristianas crece el número de los que son ajenos a la fe, indiferentes a la dimensión religiosa o animados por otras creencias. Por tanto, no es raro que algunos bautizados escojan estilos de vida que les alejan de la fe, convirtiéndolos en necesitados de una “nueva evangelización”. A esto se suma el hecho de que a una gran parte de la humanidad todavía no le ha llegado la buena noticia de Jesucristo. Y que vivimos en una época de crisis que afecta a muchas áreas de la vida, no solo la economía, las finanzas, la seguridad alimentaria, el medio ambiente, sino también la del sentido profundo de la vida y los valores fundamentales que la animan. La convivencia humana está marcada por tensiones y conflictos que causan inseguridad y fatiga para encontrar el camino hacia una paz estable. En esta situación tan compleja, donde el horizonte del presente y del futuro parece estar cubierto por nubes amenazantes, se hace aún más urgente el llevar con valentía a todas las realidades el Evangelio de Cristo, que es anuncio de esperanza, reconciliación, comunión; anuncio de la cercanía de Dios, de su misericordia, de su salvación; anuncio de que el poder del amor de Dios es capaz de vencer las tinieblas del mal y conducir hacia el camino del bien.

El hombre de nuestro tiempo necesita una luz fuerte que ilumine su camino y que solo el encuentro con Cristo puede darle. ¡Traigamos a este mundo, a través de nuestro testimonio, con amor, la esperanza donada por la fe! La naturaleza misionera de la Iglesia no es proselitista, sino testimonio de vida que ilumina el camino, que trae esperanza y amor. 

La Iglesia –lo repito una vez más– no es una organización asistencial, una empresa, una ONG, sino que es una comunidad de personas, animadas por la acción del Espíritu Santo, que han vivido y viven la maravilla del encuentro con Jesucristo y desean compartir esta experiencia de profunda alegría, compartir el mensaje de salvación que el Señor nos ha dado. Es el Espíritu Santo quien guía a la Iglesia en este camino. 

5. Quisiera animar a todos a ser portadores de la buena noticia de Cristo, y estoy agradecido especialmente a los misioneros y misioneras, a los presbíteros Fidei donum, a los religiosos y religiosas y a los fieles laicos –cada vez más numerosos– que, acogiendo la llamada del Señor, dejan su patria para servir al Evangelio en tierras y culturas diferentes de las suyas. Pero también me gustaría subrayar que las mismas Iglesias jóvenes están trabajando generosamente en el envío de misioneros a las Iglesias que se encuentran en dificultad –no es raro que se trate de Iglesias de antigua cristiandad–, llevando la frescura y el entusiasmo con que estas viven la fe que renueva la vida y dona esperanza. Vivir en este aliento universal, respondiendo al mandato de Jesús “id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos” (Mt 28,19), es una riqueza para cada una de las Iglesias particulares, para cada comunidad, y donar misioneros y misioneras nunca es una pérdida, sino una ganancia. Hago un llamamiento a todos aquellos que sienten la llamada a responder con generosidad a la voz del Espíritu Santo, según su estado de vida, y a no tener miedo de ser generosos con el Señor. Invito también a los obispos, las familias religiosas, las comunidades y todas las agregaciones cristianas a sostener, con visión de futuro y discernimiento atento, la llamada misionera ad gentes, y a ayudar a las Iglesias que necesitan sacerdotes, religiosos y religiosas y laicos para fortalecer la comunidad cristiana. Y esta atención debe estar también presente entre las Iglesias que forman parte de una misma Conferencia Episcopal o de una Región: es importante que las Iglesias más ricas en vocaciones ayuden con generosidad a las que sufren de escasez. Al mismo tiempo, exhorto a los misioneros y a las misioneras, especialmente a los sacerdotes Fidei donum y a los laicos, a vivir con alegría su precioso servicio en las Iglesias a las que son destinados, y a llevar su alegría y su experiencia a las Iglesias de las que proceden, recordando cómo Pablo y Bernabé, al final de su primer viaje misionero, “contaron lo que Dios había hecho por medio de ellos y cómo había abierto a los gentiles la puerta de la fe” (Hch 14,27). Ellos pueden llegar a ser un camino hacia una especie de “restitución” de la fe, llevando la frescura de las Iglesias jóvenes, de modo que las Iglesias de antigua cristiandad redescubran el entusiasmo y la alegría de compartir la fe en un intercambio que enriquece mutuamente en el camino de seguimiento del Señor. 

La solicitud por todas las Iglesias, que el Obispo de Roma comparte con sus hermanos en el episcopado, encuentra una actuación importante en el compromiso de las Obras Misionales Pontificias, que tienen como propósito animar y profundizar la conciencia misionera de cada bautizado y de cada comunidad, ya sea llamando a la necesidad de una formación misionera más profunda de todo el Pueblo de Dios, ya sea alimentando la sensibilidad de las comunidades cristianas a ofrecer su ayuda para favorecer la difusión del Evangelio en el mundo. 

Por último, dirijo un pensamiento a los cristianos que, en diversas partes del mundo, se encuentran en dificultades para profesar abiertamente su fe y ver reconocido el derecho a vivirla con dignidad. Ellos son nuestros hermanos y hermanas, testigos valientes –aún más numerosos que los mártires de los primeros siglos– que soportan con perseverancia apostólica las diversas formas de persecución actuales. Muchos también arriesgan su vida para permanecer fieles al Evangelio de Cristo. Deseo asegurarles que me siento cercano en la oración a las personas, a las familias y a las comunidades que sufren violencia e intolerancia, y les repito las palabras consoladoras de Jesús: “Tened valor: yo he vencido al mundo” (Jn 16,33). 

Benedicto XVI exhortaba: “«Que la Palabra del Señor siga avanzando y sea glorificada» (2 Tes 3,1): que este Año de la Fe haga cada vez más fuerte la relación con Cristo, el Señor, pues solo en él tenemos la certeza para mirar al futuro y la garantía de un amor auténtico y duradero” (Carta apost. Porta fidei, 15). Este es mi deseo para la Jornada Mundial de las Misiones de este año. Bendigo de corazón a los misioneros y misioneras y a todos los que acompañan y apoyan este compromiso fundamental de la Iglesia para que el anuncio del Evangelio pueda resonar en todos los rincones de la Tierra, y nosotros, ministros del Evangelio y misioneros, experimentaremos “la dulce y confortadora alegría de evangelizar” (Pablo VI, Exhort. apost. Evangelii nuntiandi, 80).

S. S. Francisco
Vaticano, 19 de mayo de 2013, Solemnidad de Pentecostés



Joven anímate a vivir de esta gran experiencia, Dios nos llama todos los dias es momento que respondas a su llamado y lo sigas. 

viernes, 13 de septiembre de 2013

I CAJUMI "COPEY 2013"



I Campamento Juvenil Misionero
"COPEY 2013"



      La parroquia San Josè de Siquisique organizò un Campamento Juvenil Misionero, que tuvo lugar en el caserio El Copey.

      Asimismo es preciso destacar que dicho campamento contó con la participación de jóvenes de diferentes  grupos parroquiales del municipio Urdaneta: Aguada Grande 2, Agua buena 4, La esperanza 4, El Copey 1, Siquisique 22, seminaristas 5 y el Estado Falcón también se hizo partícipe con su parroquia Mapararì con 9 jóvenes.

       Este Campamento dio inicio el día sábado 24 de Agosto con la misa de envío a las 5:00 de la tarde, precedida por el presbítero Mario Josè Piñango. Continúo su llegada con la comunidad de El Copey con cantos de alabanzas y avivamientos, seguidamente de palabras para dicho sector y bienvenidas, concluyendo con una oración.

       El día domingo se hizo una distribución de misioneros para evangelizar en diferentes comunidades como: San Rafael, Rio Abajo, Cauderales, Las Veritas, La Cocora y El Copey, mediante el cual estuvieron conviviendo con dichas comunidades , Evangelizando, celebración de la palabra, dando temas, cantos y dinámicas a los niños, jóvenes y adultos, hasta el día Viernes 30 de Agosto.

       El sábado 31 hubo un encuentro de comunidades a las 9 de la mañana, dando apertura con la celebración de la palabra, luego cantos de alabanzas  por la "Fundación Quédate con nosotros Señor", como también los jóvenes evangelizaron a través del teatro con diversas obras, después agradecimientos otorgados a cada comunidad por su participación en el I CAJUMI, finalizando con un pequeño compartir.
       En la tarde, Fundación Quédate Con Nosotros Señor dio un concierto para toda la comunidad, donde hubo testimonios, palabras, donde Dios se derramo en abundancia sobre cada persona.
  Finalmente el día domingo 01 de Septiembre se celebró la misa de Clausura en la parroquia Siquisique a las 10 AM, precedida nuevamente por el presbítero de la Parroquia Mario Piñango, acompañado de los seminaristas: Carlos Rivero, Miguel Àlmao, Josè G Àlvarez y Diego Santeliz.

       Agradecer de antemano a todas las personas que de una manera u otra hicieron que todo eso fuese posible, a aquellas ademas que regalaron su tiempo para escuchar a cada uno de los misioneros, y que aparte de abrir las puertas de su casa, también le abrieron las puertas de su corazón. Quedarían cortas las palabras de agradecimientos, sin embargo, Dios les multiplique en abundancia toda esa alegría y entusiasmo con lo cual los recibieron y una lluvia de bendiciones se derrame sobre ustedes. ¡GRACIAS!


Coordinación:
  • Presbitero: Mario Jose Piñango
  • Homijagny Dìaz
  • Elias Mendez
  • Mariesther Gutièrrez

GRUPO DE SIQUISIQUE: Jóvenes Misionero de Cristo con la Fuerza del Espíritu Santo


Capilla de El Copey
Oraciones en el Santísimo
Encuentro de Comunidades
Comunión
Comunidad: CAUDERALES



Comunidad: Rio Abajo

Comunidad: La Cocora

Comunidad: El Copey


Fundación Quédate con nosotros Señor


Fundación Quédate con nosotros Señor

Concierto: Fundación Quédate con nosotros Señor


Concierto: Fundación Quédate con nosotros Señor


Concierto





MISIONERO MAS ALEGRE: Osmar Melendez



MISIONERO MAS SERVICIAL: Anyimar Marchan



REINA DEL CAMPAMENTO: Luidey Primera
MISIONERO MAS DESTACADO: Josè D. Cordero



MISIONEROS

















MISA DE CLAUSURA

Seminarista Carlos, Presbitero Mario P, Seminarista Jose G.



Pancarta del I CAJUMI 





Coordinaciones: Mariesther G, Elias M. y Homijagny D.


Presbítero: Mario J. Piñango C.



MISIÓN CUMPLIDA



I CAJUMI "COPEY 2013"